
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, utilizó su visita a Ibagué el pasado 3 de octubre de 2025 para convocar a sus seguidores a ponerse en «modo constituyente» y defender las transformaciones que impulsa su gobierno. Ante miles de asistentes reunidos en el Parque Murillo Toro, el mandatario insistió en que el «Poder Constituyente» es la única fuente de soberanía capaz de desbloquear las reformas sociales.
El Poder Constituyente como Mecanismo de Cambio
El discurso del presidente se centró en la idea de que la ciudadanía, como fuente del poder soberano, debe tomar las decisiones cruciales del país. La alusión al Poder Constituyente, en el contexto de sus reformas sociales estancadas, fue el eje central de su intervención.
- Soberanía Popular: Petro afirmó que el pueblo es el soberano y, por lo tanto, el único que puede decidir el destino de las reformas. En su intervención, recalcó que la decisión «no es del presidente, no son los congresistas, no son los magistrados, el que decide es la fuente del poder».
- Impulso a las Reformas: El mandatario argumentó que la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente sería la herramienta para asegurar la implementación de las reformas estructurales (como las de salud, laboral y pensional) que, según su criterio y el de sus partidarios, han encontrado un bloqueo institucional en el Congreso y en otras instancias del poder.
- Propuesta de Alcance Limitado: El presidente precisó que una eventual Asamblea Constituyente no buscaría redactar una nueva Constitución, sino que podría concentrarse en impulsar las reformas necesarias en un plazo de apenas tres meses, ya que considera que la Carta Magna actual «sirve».
Rechazo a los Bloqueos y Activismo Ciudadano
Las declaraciones del presidente en Ibagué se enmarcan en una estrategia de movilización ciudadana constante. Horas antes del evento, Petro había señalado a través de sus redes sociales que un «magistrado y seis senadores se han encargado de demostrar que se necesita Constituyente», sugiriendo que las instituciones han obstaculizado la agenda de cambios.
En este sentido, el mandatario hizo un llamado explícito a la acción: «Toca ganar Congreso y Presidencia, pero lo que yo estoy proponiendo además es que nos pongamos en modo constituyente. Que en cada municipio comiencen los comités de recolección [de firmas]«. Este activismo ciudadano es presentado por el gobierno como la vía para trasladar el debate de las reformas del Congreso al escenario de la voluntad popular, ratificando su apuesta por la Constituyente como el camino para hacer realidad el Estado Social de Derecho.
Este llamado al Poder Constituyente sigue generando un intenso debate político y constitucional en Colombia, centrado en si la movilización social es la vía adecuada para reformar el sistema político y social del país.

